El material más utilizado fue el paño, así como la seda solo al alcance de las clases elevadas. Los principales materiales eran el algodón, la seda y la lana, pero también pieles de marta, armiño, ardilla o foca. En el siglo XI se inventó el telar horizontal, que permitía confeccionar piezas de hasta 30 m de longitud y 2 de anchura.
