En este período surgieron las bermudas, unos pantalones hasta la rodilla llamados así por las islas homónimas, un lugar frecuente de veraneo durante los años 1930 y 1940, en el que estaba prohibido que las mujeres llevasen las piernas descubiertas. Los pantalones eran abombados y llegaban hasta la rodilla, y llevaban calzas de punto o malla de seda. Los sombreros eran de seda, de alas anchas.